Por: Héctor Alan Cano Olivares
LAS OPINIONES EXPRESADAS POR LOS COLABORADORES SON PROPIAS Y NO LA OPINIÓN DE KANDIRE
El mundo árabe a sido visto por Occidente (sobre todo por Estados Unidos) con avidez debido a la posición estratégica que comparte esta parte del mundo con sus dos principales adversarios: Rusia y China.
Irán ha sido el enemigo a contrarrestar en Medio Oriente. Potencia regional que durante años ha desafiado el poder de Estados Unidos. Ahora éste país se ha presentado como una potencia regional que está reconfigurando el sistema internacional.
Sin duda Irán ha sido un actor importante en el conflicto sirio para evitar la desintegración del país árabe, desintegración que habría llevado a compartir el destino de Libia que después de la intervención de Occidente no ha podido encontrar la estabilidad.
Estados Unidos ha brillado por su ausencia en la reunión en la ciudad de Suchi Rusia, lugar donde se discutió el aporte decisivo en el mantenimiento de la integridad territorial de Siria, en impedir su ocupación total por los terroristas internacionales y en evitar una catástrofe humanitaria.
Rusia, Irán y Turquía acordaron reforzar la cooperación en la lucha contra el terrorismo, declaró el presidente de Rusia, Vladímir Putin, tras reunirse con sus homólogos de Irán y Turquía, Hasán Rohaní y Recep Tayyip Erdogan, recoge Sputnik.
En la reunión en Sochi participan los ministros de Exteriores de los tres países, Serguéi Lavrov, Mevlut Cavusoglu y Mohamad Yavad Zarif, y los titulares de Defensa de los mismos, Serguéi Shoigú, Nurettin Canikli y Amir Hatami.
Putin destacó el papel especial de los líderes de Teherán y Ankara en el proceso de Astaná, asegurando que "sin eso no hubieran cesado los enfrentamientos.”
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, declaró que Turquía, Rusia e Irán deben desarrollar las relaciones en todos los ámbitos. Esto sin duda alguna marca un cambio en las relaciones entre ambos países debido a que Turquía es suníta e Irán chiíta. Ambos países han tenido siempre diferencias respecto al gobierno sirio.
"Durante el encuentro bilateral que sostuve con mi homólogo iraní, Hasán Rohaní, los dos coincidimos en la necesidad de desarrollar las relaciones en todos los ámbitos", dijo Erdogan al término de la cumbre. Turquía apostaba por el derrocamiento de Bashar Al Asad, incluso invadió territorio sirio con tanques en apoyo a los grupos rebeldes. Este país árabe es parte de la OTAN y después de un fallido golpe de Estado en 2016 se ha alegado de Estados Unidos y de la Alianza Atlántica.
Recep Tayyip Erdogan se ha acercado a Rusia y a Iran recientemente con la compra de los sistemas antiaéreos S-400 de los que la OTAN ha expresado su descontento por la adquisición de dichos sistemas.
Tres países han logrado lo que Estados Unidos no logró desde 2014 con su invasión a Siria en la que no se veía un retroceso claro del los grupos terroristas.
Los tres Estados "abogaron por celebrar el Congreso de Diálogo Nacional (de Siria) en Sochi". Según Rohaní, Irán, Rusia y Turquía esperan que ese congreso, propuesto por Putin, "sea un nuevo paso para lograr la paz y la estabilidad en Siria" y para celebrar elecciones libres basadas en la Constitución.
La estabilización de Siria por parte de Rusia, Turquía e Irán, dos potencias regionales y una superpotencia ha dado un giro importante a la resolución del conflicto y al establecimiento de la paz porque anteriormente solo se optaba por la guerra como medio para lograr un cambio político.
El sistema internacional está siendo reconfigurado ante el desorden del mundo actual, legado de Obama y el Deep State ante su deseo de mantener una serie de “aliados” en Oriente Próximo y de asegurase los recursos de los países de esa región.
Los intentos de acabar con otro miembro del Eje del Mal han fracasado. Las presiones sobre Irán y Turquía solo han logrado el fortalecimiento de los lazos de estos tres países que han llevado la estabilidad a Siria y acabar con un conflicto en que Estados Unidos ha dejado un vacío de poder que ha llenado Rusia y China como dos superpotencias.
Aunque no olvidemos que los miembros del Eje del Mal han sido países no alineados hacia Occidente.
Estados Unidos no tiene nada que ofrecer al mundo y se ha constatado la falta de interés en resolver los problemas que aquejan a sus aliados de Europa con la crisis de refugiados.
La paz a Siria a llegado gracias a Rusia, Irán y Turquía mientras que antes se necesitaba de la diplomacia de Estados Unidos y sus aliados para resolver un conflicto.
La reunión de estas potencias puede significar la gestación del nuevo orden mundial en el que Rusia es una superpotencia junto a China.
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