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Félix Sejas Hinojosa, de 34 años de edad, presunto autor del feminicidio de Maeva Quispe Ortiz, de 19 años de edad, fue sentenciado la tarde de ayer juves a 30 años de cárcel en el penal de El Abra en Cochabamba, tras someterse a un proceso abreviado y declararse culpable del crimen.

“Se ha hecho justicia con respecto a la culpabilidad, se le ha sancionado pero sobre eso se ha dejado en la orfandad a tres niños”, manifestó Juan Carlos Góngora, abogado de la familia de Quispe Ortiz.

El director de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv), Luis Choque, informó más temprano que Sejas Hinojosa se entregó en horas de la madrugada.

"A las 3 de la mañana se entregó Félix Sejas, quien sería autor del feminicidio que se dio hace dos días. Gracias al trabajo de inteligencia y la presión ejercida a los familiares se pudo convencer al sujeto que se presente, este en primera instancia fugó a Oruro", detalló.

Reveló que el miércoles 20 de junio la madre y el hermano del exreo, en declaraciones informativas, confesaron que alteraron varios elementos en el escenario del crimen.

"Le cambiaron la ropa a la víctima, procedieron a limpiar el lugar. Esto conlleva responsabilidad jurídica. El Ministerio Público debe valorar estos extremos para aprehender a quienes trataron de encubrir este delito", afirmó.

"La madre y el hermano están con citación, seguramente en próximas horas el Ministerio Público determinará su situación", añadió Choque.

Sejas Hinojosa estaba en la cárcel de El Abra desde 2015, en un principio acusado de intento de feminicidio porque agredió a Quispe Ortiz cortándole los glúteos y las piernas.

Sin embargo, después de dos años, esta persona se acogió a un proceso abreviado porque al final fue acusado por violencia doméstica.

Una vez fuera de la cárcel, Quispe Ortiz lo perdonó y volvieron a vivir junto con sus pequeños hijos, quienes eran testigos de las agresiones. Pero esta vez la mujer perdió la vida en manos de su pareja y constante agresor.

Desde que Sejas Hinojosa salió de la cárcel de El Abra, Maeva Quispe vivió dos meses de constantes golpizas. La última fue el lunes 18  y acabó con su vida. A pesar de que Sejas estaba preso desde que le cortó el cuerpo en 2015, ella iba a verlo en la cárcel.

Según los familiares, el entonces reo también la golpeaba dentro del penal. Quispe no contaba lo sucedido y cuando le preguntaban por los golpes que tenía, decía que se había caído.///