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Un hombre de 47 años fue denunciado por el delito de violación y su concubina (madre de la víctima) fue denunciada por complicidad, ya que el agresor habría agredido en reiteradas ocasiones a su hijastra de 13 años con el consentimiento de su madre.

El abogado, Marco Gutierrez, informó que las agresiones sexuales comenzaron desde que la menor tenía 12 años en el año 2018, por parte de su padrastro, ya que el agresor aprovechaba que su pareja trabajaba durante el día como empleada doméstica y no paraba en la vivienda.

Tras agredirla durante tres meses en ese año, la menor decidió contar los sucedido a su madre, empero ésta en una primera instancia sostuvo una discusión con su pareja y él le amenazó con que se iría de su casa y que no le ayudaría económicamente con la manutención del hijo de 3 años que habían procreado.

La mujer con el temor de que quedarse sin la ayuda económica y al no querer que el padre de su hijo vaya a la cárcel, decidió callar el hecho. Empero su pareja este año nuevamente volvió a agredir a su hija y en una ocasión fue sorprendido en flagrancia, pero también decidió no denunciar el hecho ante la Policía.

La menor cansada de tanta agresión y al ver que su madre no hacía nada para protegerla, se escapó de su casa y se fue a la ciudad de Yacuiba, donde sus abuelos paternos vivían y decidió contarles sobre las agresiones que padecía en Tarija. De esta manera los familiares de la menor llegaron a la ciudad de Tarija para denunciar al padrastro y a su madre.

Finalmente el abogado manifestó que el padre de la menor habría fallecido en un accidente de tránsito en el año 2014, en la ruta número 9 en el municipio de Yacuiba, ya que trabajaba como chofer de trufi en un servicio interprovincial. En dicho año la menor tenía 9 años. Al año siguiente la niña y su madre decidieron irse a vivir a la ciudad de Tarija, sin saber que en dicha ciudad iba a conocer al verdugo de su hija.