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El ministro de la Presidencia Juan Ramón Quintana acusó este domingo a los partidos de la oposición de buscar hacer una “carnicería política” del gobierno con los incendios al devaluar el trabajo de emergencia para controlar el fuego la Chiquitania y el Chaco boliviano.

Dijo que la derecha no se toma el tiempo para informarle a la población cuántos litros de agua se llevaron a la gente, la cantidad de militares, médicos y choferes se desplegaron para trabajos de prevención como consecuencia del incendio.

“El oficio de la derecha es matar a la verdad las veces que se la antoje. Lo único que le interesa es echar lodo, polvo, actuar de la manera subalterna. A estas fuerzas conservadoras, no le interesa el incendio, sino usar el incendio como parte de la campaña porque no tiene ni programa ni proyecto alternativo de gobierno”, dijo en entrevista con el canal estatal.

Quintana afirmó que ante la falta de un proyecto, lo único que le queda a la oposición es erosionar la credibilidad, deslegitimar las decisiones del presidente Evo Morales, del Vicepresidente, y es tratar de echar sombras sobre este trabajo extraordinario que hacen los pobladores y el gobierno.

Sostuvo que el incendio es el mejor escenario para que la derecha haga rodar toda su imaginación con ayuda de otros actores extranjeros para lastimar el trabajo del gobierno y la gente.

Para el ministro, lo que está ocurriendo en la Chiquitania va a generar mitos, leyendas, relatos de toda naturaleza y considera que lo ideal sería que quienes hacen hoy día carnicería de esta situación medio ambiental, debieran estar trabajando al lado de la gente y en las comunidades.

“Deberían estar en primera línea en esta batalla contra el fuego y no incendiar políticamente el escenario sobre un problema medio ambiental. Ojalá estas fuerzas conservadoras que se sacan fotitos al lado de un arbusto quemado, tuvieran la entereza y decoro de decir qué hicieron en el pasado y lo que harían en el futuro”, manifestó.

El ministro Quintana cree que otro gobierno en estas circunstancias, lo primero que habría es extender la mano, pasar el sombrero a la cooperación internacional para que les caiga un plato de lenteja y para que los gobiernos extranjeros vengan a resolver la incapacidad histórica que demostró la derecha en Bolivia.

Afirmó que como gobierno, “ponen la cara y el pecho, enfrentando el fuego y los riesgos políticos”, demostrando que tiene capacidad para enfrentar como Estado soberano eventos de la magnitud como la que enfrenta de cara al país.