Video

Hoy inicia la auditoría al proce­so electoral del 20 de octubre. El control al voto lo hará la Organi­zación de Estados Americanos (OEA), entidad que llega con más de 30 expertos, aunque sin preci­sar si se trata de los mismos que llegaron para el día de la elección y que hicieron observaciones.

Es­te estudio no analizará los datos de la Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP) y nace sin apoyo de la oposición. El canciller Diego Pary dio lec­tura del acuerdo de seis puntos al que llegó con la OEA.

 El docu­mento tiene seis puntos. El pri­mero establece que la auditoría se realizará “al cómputo oficial de votos de las elecciones, así como la verificación de las actas, aspec­tos estadísticos, verificación del proceso y cadena de custodia”.

La presidenta del Senado, Adriana Salvatierra, explicó que el TREP es un mecanismo “sola­mente de información” y que “no es vinculante”.

“El mismo Órgano Electoral decía que puede haber diferencias entre el TREP y el cómputo oficial.

Para anunciar los resultados formalmente, lo que hace el tribunal electoral es revisar las actas vigentes en el cómputo oficial y, a partir de ahí, se anuncian los resultados”, dijo. En la oposición existe el pedido de incluir el TREP en el proceso de auditoría de la OEA.

El senador Yerko Núñez consideró que este sistema fue “parte clave” del pro­ceso electoral del 20 de octubre y recordó que el jefe de misión de la OEA, Manuel Gonzales Sanz, cuestionó la paralización de la publicación del TREP el mismo día de la votación.

“El alarmante que no se inclu­ya el TREP en la auditoría de la OEA. Este sistema lanzó resul­tados preliminares y, si bien, no son vinculantes, son parte del proceso electoral.

Entonces, ¿por qué el tribunal electoral contrató una empresa para ese fin? ¿por qué la presidenta del TSE (María Eugenia Choque) ordena a esa empresa paralizar la publicación del TREP? Todas esas preguntas deberían resolverse como parte de la auditoría”, reprochó Núñez.

Proceso polémico

El día de la elección, la publica­ción del TREP estuvo paralizada tras arrojar datos al 83,85% de las actas escrutadas. Eso fue a las 19:40 del 20 de octubre y después de 23 horas volvió a la red con el 95,30% de las actas verificadas. En ese momento el Movimiento Al Socialismo (MAS) obtenía el 46.86% de los votos y Comunidad Ciudadana (CC) el 36.72%.

Luego se consolidó el margen del diez por ciento, lo que dio la victoria de Evo Morales en primera vuelta. Gonzales, que fue canciller de Costa Rica, como jefe de misión de observación de la OEA, recha­zó la interrupción del escrutinio rápido y manifestó su “profunda preocupación y sorpresa por el cambio de tendencia” luego de que el TREP fue paralizado.

Esa posición logró que el Gobierno lo desacredite y se conoce que no se­rá parte de la auditoría que inicia hoy en la ciudad de La Paz. Sobre este tema, el candidato presidencial de CC, Carlos Mesa, cambió de posición en menos de 24 horas.

El martes se abrió al proceso de auditoría e, incluso, dijo que este control verificaría el “fraude”. Sin embargo, ayer leyó un comunicado en el que recha­za esta fiscalización porque fue acordada “unilateralmente” por el Gobierno con la OEA.

“La auditoría acordada entre la OEA y el candidato del MAS no ha consultado ni al país, ni nuestras condiciones, principalmente las de desconocer los resultados del cómputo realizado por el TSE y la necesaria participación de repre­sentantes de la sociedad civil en el proceso.

Nosotros no aceptamos la auditoría en los actuales térmi­nos, pactados unilateralmente”, detalló Mesa, quien no quiso res­ponder preguntas a la prensa. En el segundo punto del acuer­do, el Gobierno garantiza el acce­so a instalaciones y equipos de las entidades que requieran revisar los expertos.

El secretario eje­cutivo de la OEA, Luis Almagro, informó a través de su cuenta de Twitter que los resultados de la auditoría demorarán entre diez a 12 días y que la misma se basará en cuatro aspectos.

“Jefe Gabinete (de la) OEA in­forma que Misión de Auditoria en #Bolivia presentará resultados en 10-12 días, el trabajo se basará en cuatro aspectos: -Verificación de cómputos: actas y papeletas -Ve­rificación de proceso informático -Componente estadístico y pro­yecciones -Cadena de custodia” (Sic), escribió Almagro.

La auditoría se concentrará en la jornada electoral del 20 de octu­bre de 2019 y las fases posteriores, según establece el punto tres del acuerdo.

El siguiente parágrafo señala que “el equipo de exper­tos desarrollará sus funciones de auditoría sin menoscabo de la soberanía del Estado y de la independencia y autonomía del Órgano Electoral”.

El punto quinto establece que el informe conclusivo será en­tregado a Almagro y será éste quien reenvíe los resultados a la Cancillería de Bolivia.

El último parágrafo dicta que la auditoría arrojará conclusiones que serán vinculantes para las dos partes.

El canciller Pary acotó que se in­vitó a España, México y Paraguay para que acompañen el proceso de auditoría. Mientras, el embaja­dor de Alemania en Bolivia, Stefan Duppel, señaló que su gobierno aportará 100.000 euros para la realización del control del voto.

La Unión Europea (UE) tam­bién confirmó que aportará eco­nómicamente a la auditoría.

Esta entidad pagará a un experto para que coopere en la fiscalización. Ayer, los presidentes de los tri­bunales electorales departamen­tales se reunieron en La Paz con los vocales del TSE. Esa entidad no emitió información oficial del encuentro ni sus alcances.

Observaciones previas

El día de la elección, la misión de observadores de la OEA pi­dió ayer “explicaciones” al TSE por la suspensión temporal de la transmisión de los resultados pre­liminares.

Los 92 veedores consi­deraron fundamental que el TSE explique por qué se interrumpió la transmisión de los resultados preliminares y que el proceso de publicación de los datos del cómputo se debió desarrollar de manera fluida”.