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La Villa Imperial de Potosí tiene otro hecho para registrar en su larga y rica historia: este 4 de noviembre cumple 28 días de una movilización que se inició oficialmente el 7 de octubre por mayores beneficios por el litio y luego pasó a exigir la anulación de las elecciones y la renuncia del presidente Evo Morales.

El que llamó a la movilización, luego de cumplir sendos paros de 24, 48 y 72 horas, fue el Comité Cívico Potosinista (Comcipo) que lleva el recuento de los días de paro desde el 7 de octubre y, por cuestiones de organización sindical, no admite interrupción alguna. En los hechos, el paro comenzó el 9 de octubre, porque los días lunes 7 y martes 8 hubo flexibilización para la actividad laboral y estudiantil, pero los cívicos dicen que cumplieron con el mandato del cabildo de Uyuni que llamó a la huelga indefinida desde el 7.

La movilización en sí arrancó el 7 de octubre pero hubo un paréntesis el 18, coincidiendo con el Auto de Buen Gobierno para las elecciones, que se prolongó hasta el 22, cuando se reimpusieron los bloqueos y el paro con la indignación de un supuesto fraude electoral. Comcipo señala que la huelga estuvo vigente también en ese lapso porque hubo "movilización permanente" y se embanderó las viviendas.

Bajo el recuento oficial, este es el día 28 de la huelga y el panorama no es distinto a otros días: hay bloqueos en varios puntos, los mercados están cerrados y las presiones afectan a algunas entidades financieras.

Además de las sogas, que el presidente Morales rebautizó como "pititas", hay piedras en las calles obstaculizando todavía más el tráfico vehicular.