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"Podrán borrar fotos, símbolos e imágenes del gobierno de Evo, pero  no podrán eliminar la memoria histórica del pueblo", escribió el mandatario en su cuenta oficial de Twitter. 

El presidente legítimo de Bolivia, Evo Morales, cuestionó al Gobierno de facto en su intento por minimizar su gestión y desacreditar los logros alcanzados durante los 13 años de la administración del líder indígena.

Podrán borrar fotos, símbolos e imágenes del gobierno de Evo, pero  no podrán eliminar la memoria histórica del pueblo", escribió el mandatario en su cuenta oficial de Twitter. 

Podrán borrar fotos, símbolos e imágenes del gobierno de Evo, pero no podrán eliminar la memoria histórica del pueblo. Durante 13 años, honramos la confianza que los bolivianos nos dieron con su voto, trabajando por el país. Los datos económicos y sociales son innegables.— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) January 4, 2020

"Durante 13 años, honramos la confianza que los bolivianos nos dieron con su voto, trabajando por el país. Los datos económicos y sociales son innegables",  señaló Morales, quien se encuentra asilado en Argentina en espera de recibir el estatus de refugiado político.

El pronunciamiento de presidente legítimo se produce cuando la presidenta de facto, Jeanine Áñez, pidió a los bolivianos impedir el retorno de los "salvajes" al poder, en referencia a Evo Morales, primer jefe del Estado indígena del país. 

"No permitamos que ninguna ambición personal, por un lado, disperse el voto y se salga con la suya y mucho menos que los arbitrarios, los violentos y que los salvajes puedan volver al poder, creo que eso es responsabilidad de todos", afirmó la autoproclamada presidenta.

Áñez, que asumió el 11 de noviembre, tras consumarse el golpe de Estado,  participó en un acto en la ciudad de Sucre en el que recibió las llaves de la ciudad. 

La senadora ha defendido además un frente común de partidos políticos para enfrentarse al Movimiento Al Socialismo (MAS) de Morales en las elecciones generales previstas para la primera semana de mayo.

En una entrevista con el periodista Luis Hernández Navarro, el ministro de Economía y Finanzas boliviano, Luis Alberto Arce, consideró que "de continuar la derecha manejando el Estado boliviano van a retornar las viejas prácticas neoliberales. Y tendremos los resultados económicos y sociales del neoliberalismo".

Arce, señalado como el artífice del milagro económico boliviano, añadió que "de continuar este retorno del modelo neoliberal en mi país, al pueblo boliviano le espera repetir la triste historia que vivimos durante los 20 años de neoliberalismo en Bolivia".

Consideró que el fascismo del régimen de Áñez, no es aquel viejo de los tanques, los uniformes de militares en las calles, sino que está cambiando su forma de presentarse en América Latina.

Ahora es una forma más "amigable", aunque en el fondo sigue siendo fascismo. Y entraña el racismo. Un racismo que rebrotó de una manera contundente con el golpe de Estado al presidente Evo Morales.///