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La Fiscalía presentó la acusación formal contra los exfiscales Edwin Blanco y Susana Boyán, por la presunta comisión de los delitos de resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes e incumplimiento de deberes por el caso del bebé Alexander.

El fiscal de materia Miguel Aramayo Céspedes informó que se está solicitando al Juez Quinto de Instrucción Anticorrupción que ambos exfiscales sean llevados a juicio oral por haber escondido información que podía liberar de culpa y participación al médico Jhiery Fernández Sumi y, lejos de aquella posibilidad, presentaron acusación contra el médico, quien fue sentenciado a 20 años de cárcel por el Tribunal Cuarto de Sentencia de La Paz, de manera irregular.

20 años de cárcel fue la sentencia que se dio a Fernández y que fue anulada luego de que la juez Patricia Pacajes asegurara que el médico fue sentenciado por presión social y sin pruebas.

Explicó que ambos representantes del Ministerio Público firmaron y presentaron imputación contra Jhiery Fernández con documentos que “no acreditan de manera indiciaria la participación del imputado (…)”, lo que implica que no existe fundamentación o descripción del comportamiento o modo de actuar descubierto por el Ministerio para adecuarlos al tipo penal imputado”.

El médico fue cautelado en diciembre de 2014 y cumplió detención preventiva por cuatro años. Ambos fiscales (Blanco y Boyán) presentaron acusación formal en fecha 29 de junio de 2015 con argumentos y prueba documental que fueron observados y tasados de ilegal, tal como dice el informe de fecha 18 de mayo de 2021 suscrito por el fiscal Gonzalo Chacón Silva, citado por el portal de la radio Erbol.

Dicho documento agrega que muchas “pruebas” utilizadas por Blanco y Boyán fueron señaladas de irregulares, razón por la cual la imputación formal concluye que de las muestras colectadas a Jhiery Fernández Sumi “no se detectaron presencia de antígeno prostático específico y las pericias realizadas dentro de ese proceso investigativo no determinan haber encontrado ADN correspondiente en ninguna muestra colectada el día de los hechos, aspectos que demuestran científicamente que el acusado no tuvo contacto sexual con el infante y que no se encontraba en la supuesta escena del crimen”.

Actualmente Blanco es juez en el distrito de La Paz y Boyán es abogada en ejercicio libre de la profesión.