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Los hombres que abusaron fisicamente de sus parejas lideran las estadísticas del elevado número de personas privadas de libertad en la cárcel de Cantumarca, de acuerdo con los datos del juzgado de ejecución penal del Tribunal Departamental de Justicia (TDJ) de Potosí.

El titular de ese juzgado, Héctor Gómez, afirmó que la violencia familiar repunta en el primer lugar seguido de violación y estafa como las mayores causas por las cuales están privadas de libertad.

“Lo que nos sorprende, que haciendo el análisis, cuántas personas están detenidas preventivamente y por qué delitos, una gran mayoría, están por violencia familiar”, informó.

Lo raro, según la autoridad judicial, los agresores de mujeres no quieren someterse al proceso abreviado para descongestionar la prisión que, hoy en día, tiene 540 internos.

"Llamar a la reflexión a las personas que, por primera vez, están detenidas por violencia familiar puedan someterse a un procedimiento abreviado, con tratamiento sicológico para recobrar su libertad", afirmó.

Gómez informó que la condena por infringir la Ley 348 no es alta como, quizá, piensan muchos de los internos en el recinto penitenciario.

"Los castigos o las condenas no son altas para que no puedan salir. En un procedimiento abreviado se les puede dar tres a dos años de condena o puede ser una suspensión condicional de la pena o un perdón judicial, de acuerdo con la pena que se le otorgue", afirmó.

El juez reflexionó que de una vez se debe erradicar el “machismo” en la sociedad porque la mujer merece el respeto y es necesario protegerlas y cuidarlas.

La autoridad judicial afirmó que en el penal de Cantumarca solo el 35 por ciento de los internos tiene sentencia ejecutoriada, mientras que el 65 restante es detenido preventivo. "Una gran cantidad están detenidos preventivos”, afirmó

La violencia ejercida en el terreno de la convivencia familiar o afectiva, que comprenda: desde el empleo de la fuerza física, hasta el hostigamiento, acoso o intimidación, tienen sanción de 2 a 4 años, siempre y cuando no constituya otro delito, señala la Ley 348 para las personas que cometan el delito.

El juez de ejecución penal, Héctor Gómez, admitió que hay debilidades al interior del recinto penitenciario.

Una de esas debilidades es la seguridad: el ingreso de droga y alcohol. “No sé cómo, pero entra. En las requisas se están encontrando las sustancias controladas y esto es muy difícil de cortar y los de seguridad tratan de evitar este tipo de hechos de alcohol y droga", dijo y señaló que hay internos a los cuales se les encuentra ebrios.

“Una gran mayoría están por violencia familiar en la cárcel de Cantumarca".