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EE.UU. ha revelado en qué sectores impactan las nuevas sanciones a Rusia por el caso Skripal que ya fueron anunciadas a principios de este mes. 

Las sanciones, que se publicarán oficialmente y entrarán en vigor el 27 de agosto, prevén poner fin a la asistencia extranjera, algunas ventas de armamento y la financiación a Rusia, así como la negación de la concesión de préstamos a Moscú y la prohibición de las exportaciones de bienes y tecnologías de interés para seguridad.

Según declaró el Departamento de Estado norteamericano el pasado 8 de agosto, las medidas se adoptaban en respuesta al envenenamiento del exagente doble de inteligencia Serguéi Skripal y de su hija Yulia, ocurrido el pasado mes de marzo en la ciudad británica de Salisbury, y del que Washington, al igual que Londres, culpa a Moscú, que califica esta acusación de insostenible por falta de pruebas.

Por su parte, Moscú prometió preparar un paquete de medidas de respuesta ante este "nuevo paso inamistoso de Washington" que -denuncia- se apoyan en un "pretexto inventado". "Rusia no tuvo ni tiene nada que ver" con los casos de uso de armas químicas, subrayó el portavoz del presidente ruso, Dmitri Peskov. "Al Gobierno de nuestro país se le acusa directamente de haber utilizado la sustancia neurotóxica de grado militar,Novichók, aunque la parte británica hasta ahora no ha podido presentar ninguna prueba de la participación rusa en lo ocurrido en Salisbury", afirmó a su vez la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova.