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A golpes y sin piedad, un monje budista asesinó a un niño novicio de 9 años identificado como Wattanapol Sisawad, como lo informaron fuentes médicas. El hecho ocurrió en Tailandia.

Suppachai Sutthiyano, de 64 años, reconoció su delito, manifestó que perdió el control y golpeó al menor con un bastón, y empujó su cabeza contra un pilar.

El pequeño novicio fue llevado al hospital provincial de Kanchanaburi, en Tailandia, pero entró en coma, y falleció el jueves por la noche, como lo declaró un empleado a un medio de comunicación.  

Además, el monje argumentó que el niño había perturbado una ceremonia que se realizó el fin de semana pasado.

Las autoridades ya detuvieron a Suppachai Sutthiyano, asimismo fue autorizado a abandonar su régimen de clausura el domingo.

Un promedio de 95% de tailandeses son budistas practicantes, una de las tasas más altas del mundo, y el país asiático tiene unos 300.000 monjes.

El clero del reino ha estado en el ojo de la tormenta, al protagonizar diversas polémicas en los últimos años, por casos con relación al consumo de drogas, de embriaguez, de apuestas sospechosas, recurrir a prostitutas o por el delito de corrupción.