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El número de personas que declaran a la Hacienda española patrimonios de más de 30 millones de euros, considerados superricos, aumentó un 150 % entre 2007, año que comenzó la crisis económica, y 2016, cuando ya se dio por superada, según datos de la Agencia Tributaria.

En su último informe estadístico sobre el impuesto sobre el patrimonio, que se remite a datos de 2016, en España hubo ese año 579 personas que declararon más de 30 millones de euros de patrimonio, una cifra que ha creciendo con fuerza en los últimos años, aunque aún supone sólo el 0,29% de las declaraciones.

En 2007, tan sólo el 0,02% de las declaraciones fueron de superricos (los que declaraban más de 30 millones de euros), puesto que ese año la Agencia Tributaria sólo recibió 233 liquidaciones dentro de ese tramo.

Un año antes, en 2006, sólo hubo 200 contribuyentes en ese tramo, lo que quiere decir que en una década los superricos que declaran en España se han casi triplicado, con un incremento acumulado del 189,5%.

Un año más, la mayor parte de los declarantes de este impuesto están en Cataluña (el 37,5% del total), seguida muy de lejos por la Comunidad Valenciana (11,1%), Andalucía (9,2%) y Madrid (8,8%).

Esta última región, sin embargo, tiene el patrimonio medio declarado más alto, con 9 millones de euros, mientras que la media de toda España se sitúa en 3,19 millones de euros.

Entre los años 2008 y 2010 este impuesto que grava el patrimonio, quedó suprimido, pero luego, y a raíz precisamente de la crisis, se restableció con carácter temporal y todavía no se ha suprimido.

Desde entonces se puede observar un paulatino crecimiento del número de personas con gran patrimonio.