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En Reino Unido, un niño de 13 años murió en su colegio víctima de su alergia severa al queso y el bullying. Karanbir Cheema era molestado por sus compañeros. Ellos lo persiguieron con un trozo de queso por el centro educativo. Luego, lo arrojaron dentro de su camisa. El escolar tuvo una complicación alérgica y murió.

Cheema era alérgico a todos los lácteos. Además, no podía consumir gluten, trigo ni nueces. Después de que sus compañeros del colegio de secundaria William Perkin Church de Reino Unido le tiraran queso; el escolar de 13 años, que también sufría de dermatitis y asma, sufrió un paro cardíaco. El hecho ocurrió en su centro escolar, ubicado en suburbio de Greenford, en la ciudad de Londres del Reino Unido.

Aparentemente, los efectos de su alergia no fueron inmediatos. Después de que sus compañeros lo acosaran, el escolar se dirigió a la dirección del colegio de Reino Unido. Allí solicitó medicamentos antialérgicos. Sin embargo, no mejoró, por lo que las autoridades del centro educativo decidieron darle aviso a los servicios de urgencias.

Cuando llegaron los paramédicos, la reacción alérgica no era leve. El escolar de 13 años tenía problemas para respirar. El queso que le habían arrojado mientras lo acosaban por su reacción alérgica le estaba generando urticaria y un paro respiratorio.

Acto seguido, los paramédicos de Reino Unido solicitaron refuerzos. Cuando regresó le administraron adrenalina, pero no dio resultado. Karanbir Cheema fue trasladado a un centro de salud, pero no pudo recuperar la conciencia. Su alergia a los lácteos le costó la vida. Murió diez días después de que lo persiguieran con queso en su colegio, rodeado de sus familiares en la cama de un hospital.

Un niño fue arrestado por la muerte del menor pero la policía de Reino Unido no ha realizado una acusación formal. Trascendió por los padres de los demás niños que el niño sufría de bullying por causa de su alergia a los lácteos.