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En Reino Unido, un hombre fue rescatado de las garras de, aparentemente, la explotación laboral, después de haber sido tratado en condiciones infrahumanas por cuarenta años. Las autoridades locales calculan que habría sido atraído por su captor a los 17 años.

La policía de Reino Unido considera que se trata de un caso de esclavitud moderna. Los efectivos policiales visitaron un campamento de casas móviles, ubicadas al norte de Carlislie, en Cumbria. Es conocido como el campamento gitano de Adriano de Inglaterra. La Autoridad de Abusos Laborales realizó un allanamiento en la madrugada y encontró a un hombre de 58 años en un casita verde de madera, que solo tenía espacio para una silla, un televisor y sábanas sucias que improvisaban una cama. El espacio era aproximadamente de 20 centímetros por cada lado.

Debido a las condiciones deplorables en las que se encontraba, la policía arrestó a un hombre que vivía al costado del cobertizo, que contaba con 79 años. El cargo que se le imputó fue de delito de esclavitud moderna, ya que lo mantenía en terribles condiciones, a pesar de que realizaba trabajos para él. El caso ha sido considerado como explotación laboral, por parte de los policías de Inglaterra.

40 años como esclavo

Según la investigación de las autoridades policiales de Reino Unido, es “incomprensible” que la situación de explotación laboral se haya mantenido tanto tiempo. Aparentemente, los vecinos del lugar sabían que él vivía en el reducido cobertizo. El hombre rescatado de 58 años realizaba trabajos ocasionales para la familia del hombre que fue detenido, de 79 años. Trascendió que estos trabajos no eran remunerados y que los llevaba a cabo desde los 17 o 18 años.