La risa, una medicina gratuita en Tarija
“Estaba un chapaco descansando bajo una higuera, era el cumpa de todos, y se le aparece el diablo diciéndole que si adivina su nombre se lo llevará con él, únicamente le tiene que decir con qué letra empieza su nombre, entonces el cumpa le dice que su nombre empieza con `J´, después de muchos intentos y no poder adivinar el nombre, el diablo se da por vencido y le pide que diga su nombre, entonces el cumpa le dice: Me llamo Jelipe”.
Éste es el humor chapaco, que se lo vive día a día en las calles tarijeñas, en las reuniones, en el trabajo y en todo lugar. Como bien dice el tarijeño Luis Fernando Ortiz Lema nuestra gente está siempre dispuesta con buen ánimo a la broma, a la chacota, al chiste que con estruendo se convierte en una “carcajada” pero esto también sucede ahora en la ciudad.
Los chapacos no permiten en ninguna circunstancia ser blanco de burla porque entonces replican sin rodeos, como casi siempre sucede. Tomaremos como ejemplo el comportamiento de un oficial de ejército que a un campesino le dijo: “Oye tú, ¿a dónde va este camino?” a lo que el aludido responde “este camino no va ni viene, ay numas se queda”.
El oficial tocado por la respuesta recriminó “y a ¿dónde van los sonsos como vos?”, y el chapaco en tono de fiesta le contestó “al colegio militar mi oficial”.
El humor de acuerdo a su definición en el diccionario “es la disposición del ánimo habitual como facultad de apreciar y mantener el aspecto cómico o ridículo de algo”. Dentro de éste el chiste es un dicho agudo y gracioso que encierra un sabor a la tierra natal con ingenua credibilidad, en la que no tiene cabida la malicia, menos la mala intención.
Pero, según Ortiz Lema, en Tarija también existe la chanza y la chacota, que resultan ser bromas hechas sin malicia, dichos alegres, graciosos y ruidosos con los que se celebra algo con regocijo como para promover una reacción como “contrapunto”.
-“Desdichado el dichoso, de aquel que dichas gozo, las dichas que poco desdichadas las llamo yo”, dice el hombre.
A lo que la mujer responde:
- “De que te quejáis quejoso si ni pena tenis andrajoso”.
Más aún, otra variable para condimentar las entretenidas jornadas tarijeñas es el cuento chapaco que con orgullo podemos decir que ha calado en nuestro sentimiento con sinceridad y nobleza.
No tiene fronteras, ingresa furtivamente, sencillo, omnipresente y a veces señorial, como un fiel compañero de interminables tertulias.
El aro aro
Sin embargo, si de humor chapaco hablamos la lista es interminable. Pues un condimento infaltable del humor tarijeño es el aro, aro que viene unido a la copla. Según el escritor René Aguilera Fierro la copla tiene sus propias formas de expresión y una de ellas es el “aro”, rima picaresca que se recita en el intermedio de una cueca y que fue recopilada y clasificada de diversas maneras. Empero, se dice que la obra que las reúne de mejor manera es la escrita por Iván Humérez Tórrez titulada, “Mil aros de oro”.
A la copla se la puede considerar como folclore, ya que cuando le pertenece al pueblo pierde al autor, subraya Aguilera y agrega que por su versatilidad se pueden adecuar a la región donde se las interpreta.
Uno de los primeros tarijeños que se ocupó de las coplas ha sido Juan de Dios Sigle Romero, publicó en 1976 una primera selección como cancionero chapaco bajo el título “Recopilación de versos del folclore tarijeño”.
Otros trataron de hacer atisbos de clasificación como Mauro Molina Balsa y posteriormente Jaime Perales que escribió “Mil coplas tarijeñas”, en el que ha tratado de hacer un estudio y darle forma a la recopilación de este tipo de rima chapaca. Tampoco se debe olvidar a Fanor Ortega Dávalos.
Sin embargo, Iván Humérez Tórrez es quien mejor trabajó una clasificación de la copla y el “aro” y al momento su libro es el más completo en cuanto a una clasificación desde diversas líneas como su procedencia, el sentido y hasta a quienes está dirigido.
De acuerdo a este libro, la copla y el aro son el resultado del ingenio y sentimiento de quienes lo componen y constituyen un aporte en la transmisión oral cultural y popular de un pueblo. De esta manera, Humérez clasifica a los aros: De amor y desamor
Pueden ser tiernos galantes dulces y poéticos cuando se trata de encantar y conquistar, pero también pueden ser de dolor, odio, ofensivos o de lamento cuando se trata de despecho. Pero lo que es una transversal de todo esto es la picardía chapaca.
La risa, una medicina gratis en Tarija
La risa es la mejor medicina para la buena salud. Un sinnúmero de estudios médicos, psicológicos y psiquiátricos han llegado a esta conclusión. Pero, lo cierto es que en Tarija reír no cuesta nada, es un remedio gratis.
“La risa no se compra ni se vende ni se alquila ni se expende en tiendas o farmacias porque no es una medicina, se la adquiere en forma natural, basta un poco de buen humor, un político a su lado, un indio runa al costado, su suegra en casa, una negra y un blanco pa las buenas o malas acciones, por eso ríase mientras pueda, de usted, de sus amigos, de todos”, dice el tarijeño Luis Fernando Ortiz Lema.
Pero más allá de Tarija, desde hace muchos años la risa se ha considerado una terapia. Esto era bien sabido por las civilizaciones antiguas. Prueba de ello son los comediantes que hacían reír a los reyes cuando estaban enfermos o tristes.
Y, más recientemente, están los estudios del neurólogo estadounidense William Fry, que dicen: “La risa es un verdadero desintoxicante moral capaz de curar o por lo menos atenuar la mayoría de nuestros males. Además, no hay ningún peligro si se supera la dosis” (1964).
“La risa es distracción ante las preocupaciones de la vida y el estrés”, detalla Carlos Vásquez, médico tarijeño.
Según los estudios, cuando nos reímos nuestro cuerpo produce endorfinas, la hormona de sentirse bien. “Las endorfinas promueven una sensación general de bienestar, mejoran nuestro estado de ánimo, aumentan nuestra energía y reducen nuestros niveles de estrés”, explica Vásquez.
La evidencia científica también ha encontrado que la risa no sólo aumenta la felicidad y el bienestar, sino que puede provocar cambios físicos saludables en nuestro cuerpo que promueven la buena salud y fortalecen las relaciones.
Entre los beneficios para la salud están el incremento de la resistencia al dolor, el fortalecimiento del sistema inmunológico, una mejor la circulación y la reducción del riesgo de ataques cardíacos.
“Si quiere reír in esfuerzo visite Tarija, lo bueno y lo churo está aquí”, dice Paulino residente de Paicho, una comunidad conocida por dos razones, sus lindas mujeres que ganaron varios certámenes campesinos de belleza y por ser una región productora de durazno.
mg
Notas Relacionadas
Radio en Vivo
Ver Mas]
Encuesta [Mas Leidas
- Personalidades del mundo denuncian persecución contra Evo Morales y exigen elecciones sin proscripciones en Bolivia
- Luis Arce, el victimario que se victimiza: criminaliza la protesta para tapar su fracaso
- Evo Morales rechaza llamado a la unidad de Andrónico Rodríguez y denuncia injerencia extranjera
- Evo Morales no se rinde: “No voy a huir de Bolivia” mientras el gobierno de Arce silencia al pueblo
- Luis Arce se victimiza, culpa a Evo y esquiva su rol presidencial
- Una derecha desalmada y sin rumbo se arrastra al MAS para silenciar al líder indígena que desafió sus privilegios
- Al pueblo no se silencia: Evo Morales responde a la persecución política del gobierno
- El gobierno de Arce repite la receta del régimen de Añez para proscribir a Evo y acallar al pueblo