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Un sismo de magnitud 6,6 sacudió el martes la isla de Mindanao, en el sur de Filipinas, anunció el Instituto de Estudios Geológicos de Estados Unidos (USGS), y provocó escenas de pánico en medio de reportes sobre heridos y cuantiosos daños materiales.

Inicialmente el USGS había indicado que la magnitud del sismo fue de 6,8. La entidad también señaló que no se había registrado riesgo de tsunami en la región.

Reuel Limbungan, alcalde de Tulunan, una ciudad próxima del epicentro, aseguró a Agence France-Presse que “nuestra sede municipal ha quedado destruida”.

“Estamos recibiendo muchos reportes sobre heridos, pero hasta ahora no hemos podido confirmarlos”, añadió.

El epicentro de este sismo se localizó en el mismo lugar donde otro estremecimiento de magnitud 6,4 registrado hace dos semanas dejó un saldo de por lo menos cinco personas muertas y extensos daños materiales.

Este martes, numerosas familias abandonaron sus hogares en la región de Mindanao.

Filipinas es parte del llamado “Anillo de Fuego” del Océano Pacífico, un arco de intensa actividad sísmica que se extiende desde Japón hasta el sudeste asiático.