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El director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) Marcelo Montenegro advirtió que las pocas pruebas que el Gobierno realiza para detectar el coronavirus en Bolivia puede generar contagio masivo de la enfermedad debido a que no se tiene el número exacto de los portadores ni de los asintomáticos.

“Desde el primer reporte de la primera persona infectada en Santa Cruz se han realizado 1.736 pruebas, en La Paz 1.089, en Cochabamba 830, en Oruro 264, en Potosí 128, en Chuquisaca 113, en Pando 82, en Beni 48, en Tarija 39. Son números muy pequeños para la cantidad de días que el fenómeno se nos ha presentado, esto está mostrando que la magnitud a la que se tiene que enfrentar el problema implica una estrategia de test masivos. Lo señalo y lo enfatizo, si no se aplican estos test masivos vamos a salir de la cuarentena y muchos van a contagiar a otros”, dijo a radio Erbol.

Explicó que Bolivia comparativamente con países de similar cantidad de habitantes (11.700.000) como Ruanda, Zinbabwe, Bélgica, está muy por debajo en los test  para detectar el coronavirus debido a que se aplican 369 pruebas por millón de habitantes, cuando por ejemplo República Dominicana está haciendo 1.283, Bélgica 14.000, Cuba 2.685, Grecia que está saliendo de una gran recesión económica aplica 2.681.

“Entonces no estamos cumpliendo con el deber de hacer test masivos. Uno se pregunta también ¿cómo estamos en América Latina?, Bolivia está casi al último (…).  Paraguay, nuestro vecino hace 824 pruebas para detectar el virus y otros lo están haciendo mucho mejor como Colombia 1.345 test por millón de habitantes, Perú 4.723, Chile 6.734. Eso está dando idea de que nuestras 367 pruebas por millón de habitantes no son suficientes”, sostuvo.

A su juicio, Bolivia es un país pobre, de ingresos medios y se dice que no ha contado con los recursos suficientes para adquirir antes los insumos que detectan el coronavirus y que en este momento está a la cola de las naciones para adquirirlos “y eso es una falta de previsión a la hora de tomar en serio el tema de haber hecho esos pedidos, Chile lo ha hecho en enero y otros países también, nosotros no”.

En este contexto, el académico explicó que por millón de habitantes Bolivia debería estar haciendo unas 2.500 o 3.000 pruebas, de lo contrario no se podrá detectar dónde están los focos de infección para aislarlos y hacer un buen tratamiento con una nueva estrategia. “Un número de 3.000 test o superior a ello ayudaría bastante y si se lo hubiera hecho mucho más antes, en estos momentos tendríamos mucha más certeza de cuál es el panorama de la evolución de la pandemia”, afirmó.

Explicó que la UMSA tiene epidemiólogos  con experiencia a la hora de aplicar los test. Según su criterio éstos deberían hacerse en forma estratificada, siguiendo la ruta de contagios como también los contactos en base a un protocolo.

“La idea es que debe aplicarse un plan de hacer un tipo de muestreo, incluso a los asintomáticos porque si solamente vamos a hacer los test a personas que presentan ciertas molestias y ya están mostrando un cierto signo de que tienen el virus probablemente no vamos a poder aislar al que es asintomático y está contagiando”, concluyó./////