Video

Las finanzas de Juan Carlos I continúan bajo sospechas. La fiscalía del Tribunal Supremo de España investiga una serie de irregularidades que vinculan al rey emérito sobre el contrato que sostuvo con Arabia Saudita.

“Resulta preciso, pues, la práctica de nuevas diligencias que afectan directamente al rey emérito, quien -como es sabido- se encuentra aforado ante la Sala Segunda del Tribunal Supremo”, se lee en la nota de la fiscalía del Tribunal Supremo.

La investigación se trata sobre el destino de 80 millones de euros, que se habrían repartido ilegalmente en el proyecto de la construcción del tren de alta velocidad que une las ciudades saudíes de Medina y La Meca, por lo que desde este lunes el órgano judicial ha asumido el caso.

El pasado mes de septiembre, según los testimonios ofrecidos  por la empresaria alemana Corinna Larsen, con quien Juan Carlos I tenía una relación extramatrimonial, el rey emérito de España es sospechosos de haber recibido comisiones por la licitación de dicha línea ferroviaria a la marca Alta Velocidad Española (AVE) en 2011.

Este asunto volvió viral tras datos revelados por la prensa suiza y británica, incitando que la corona anunciara que Felipe VI renunciaba a la herencia que podría percibir de su padre suspendiendo también su asignación anual, según recoge la agencia de noticias española Europa Press.

La fiscalía española publicó el 5 de junio un decreto para esta investigación que está vinculada a otra de la fiscalía suiza sobre una supuesta cuenta millonaria del rey emérito en un paraíso fiscal.

Juan Carlos I al adjudicarle su puesto a Felipe IV perdió la inmunidad constitucional que la corona le otorgaba, por lo que podría pasar el resto de sus años tras las rejas si la fiscalía de España llega a corroborar la vinculación del monarca con los hechos. ////