A casi un mes de asumir funciones, el nuevo gerente General de FANCESA, Marcelo Díaz, dijo haberse encontrado con una empresa fuerte financiera y tecnológicamente, con una planta de producción funcionando al 95% de su capacidad y con un millonario proyecto de crecimiento en curso.
"Es una empresa con una fortaleza financiera innegable, primer elemento importante. Luego, tiene una fortaleza en la tecnología de producción, esto más la inversión que se viene vamos a estar en la vanguardia de la tecnología de la producción", vaticinó Díaz.
Esta fortaleza permitió a FANCESA tener la confianza de la Bolsa Boliviana de Valores (BBV), que aprobó un programa de emisiones de bonos por $us 150 millones, que representan el 60% de la estructura financiera de la nueva fábrica que construye en Sucre, con una inversión de entre 215 millones y 250 millones de dólares. Las demás fuentes provienen de recursos propios y la banca privada.
A propósito de la nueva planta, dijo que los primeros equipos y maquinaria, que actualmente están en ultramar, llegarán a Sucre hasta fin de año.
La planta tendrá la mayor tecnología de punta que permitirá reducir los costos de producción, aseguró.
"Vamos en cronograma de acuerdo a lo establecido en términos de la construcción de la misma planta, de los emplazamientos y ya vamos a empatar en el cronograma financiero y cuando estemos con la nueva planta tenemos una gran oportunidad de expandir nuestras fuerzas de producción y comerciales hacia el resto del país", resaltó.
Un tercer tema de evaluación son los procesos internos que faciliten una mejor toma de decisiones, lo que, a criterio de Díaz, debe pasar por una institucionalización del talento humano así como de los mismos procesos.
"En función de ello se irá reordenando la casa y generando las eficiencias que requiere la empresa; uno, para reafianzar su posición de fortaleza financiera y de producción; dos, para generar habilidades y competencias en temas de comercialización, que ese es el trabajo inmediato en el cual estamos todos inmiscuidos en el equipo gerencial y en el directorio", resaltó.
En la parte operativa, agregó, la planta funciona al 95% de su capacidad y todo lo que produce se vende aunque con cierto "rezago".
Respecto al ingreso de otras cementeras a Sucre, pidió no alarmarse porque los volúmenes ofertados son "marginales". Sin embargo, "nuestra estrategia comercial contempla la entrada de la competencia, pero también contempla resistencia y respuesta a la misma".
Saludó el ingreso de la competencia al mercado de Sucre y pidió el mismo trato cuando la cementera chuquisaqueña también penetre a sus tradicionales plazas comerciales en el país.
