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¿Cuándo aterrizó en Bolivia el coronavirus? La versión oficial dice que fue el 10 de marzo, cuando se confirmó que dos mujeres que estuvieron en Italia pisaron suelo boliviano con el virus en sus cuerpos. Una de ellas se recluyó en Santa Cruz y la otra en Oruro.

Hasta entonces, la mayoría de los países ya tenían casos de Covid-19 en sus territorios. Hasta esa fecha, Bolivia había aguantado sin ningún caso confirmado y fue uno de los últimos en sumarse a la lista de las naciones con la pandemia ya echando raíces. 

Comparado con los países de Asia, Europa y América, la Covid-19 demoró en desembarcar en Sudamérica, y más aún en Bolivia. Pero tan solo meses después, los países de la región se ubicaron entre los primeros en casos y en índices de letalidad, como Perú, México y Bolivia. En ese orden.

Hasta el 10 de marzo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) tenía registrados en la región 113.702 positivos y algo más de 4.000 decesos.

Fue el mes del acopio y, a la par, la especulación. La ciudadanía comenzó a irse en masa a  los centros de abasto y supermercados para proveerse de alimentos y otros insumos para los días posteriores al 22, fecha en que entró en vigencia la cuarentena total en el país, fecha en que nuestras vidas dieron un giro de 180 grados. Nada sería lo mismo a partir de entonces. Y nada es lo mismo hoy, un año después.

Marzo de 2020 terminó con 115 casos positivos y siete decesos en el país. En promedio ese mes terminó con casi seis casos por día y con un índice de letalidad de un 6%. Las cifras aún no daban miedo, pero eran un atisbo de lo que se vendría los meses siguientes, por todo lo que ya pasaba en Italia, España y Francia.

Más de la mitad de los 115 estaban en Santa Cruz y Cochabamba estaba en segundo lugar. El resto de los departamentos también cerraron con casos positivos. El único que aún no tenía contagiados era Beni, el que meses después se convertiría en el departamento más golpeado por la pandemia. Incluso llegó a superar los 100 fallecidos por cada 100  mil habitantes, un promedio que lo ubicó por encima de los países del mundo más castigados, que registraban no más de 70 muertos por cada 100 mil habitantes.

Dos días después de la llegada de la pandemia al país, el gobierno tomó medidas de emergencia. El 12 firmó el Decreto Supremo 4179 por el que declaró Situación de Emergencia Nacional y estableció restricciones a la circulación de personas, ajustes en los horarios de trabajo, limitación de reuniones y prohibición de concentraciones masivas.

También el 12 de marzo el Órgano Ejecutivo dispuso la suspensión de las labores escolares y educativas en colegios, institutos y universidades del país, y se suspendieron los vuelos hacia y desde los países de Europa. Comenzó el encierro, no sólo de los ciudadanos, sino del país respecto al mundo. 

También fue el mes en que comenzaron a emerger los actos de imprudencia e irracionalidad. Una de las primeras pacientes de coronavirus empezó  a vivir acoso en su domicilio en el oriente boliviano y algunos hospitales como La Portada en La Paz fueron objeto de hostigamiento de vecinos, que no querían que los pacientes sean internados en ese centro de salud.

El 13 de marzo, vecinos del macrodistrito Max Paredes, donde está el Hospital de La Portada, realizaron una protesta en rechazo a que ese centro médico sea utilizado para pacientes con Covid. La protesta se realizó después de una inspección de ese centro realizada por la entonces presidenta Jeanine Añez, junto alcalde Luis Revilla y al representante de la Organización Mundial de la Salud en Bolivia.

Y a raíz de estos incidentes, el gobierno anunció sanciones penales contra las personas que  saboteen la atención médica en los centros de salud designados para la atención de pacientes con Covid-19.

Estos actos de intolerancia se replicaron en los hogares de trabajadores del área de salud, donde eran presionados por los propietarios para abandonar sus domicilios (en alquiler) porque los consideraban un riesgo.

  Cada día después del 10 se reportaban casos. Ya no había tregua y la primera muerte en el país llegó al 29.

El gobierno de Jeanine Añez tomó medidas urgentes. El 15 de marzo amplió la restricción del acceso a Bolivia de viajeros que provenían de los países del área Schengen, además del Reino Unido, Irlanda e Irán; luego, decretó la emergencia sanitaria nacional, emitió el decreto del Bono Familia y otras disposiciones  relacionadas al área económica.

Marzo nos sumergió en una pesadilla, de la que aún no salimos, pero también nos lanzó a un camino marcado por carencias, miserias humanas, solidaridad, reinvenciones y muerte.

Los cuatro momentos  clave de marzo 
 

10/3 El 10 de marzo Bolivia registró los dos primeros casos de Covid-19. Dos mujeres procedentes de Italia, una de Santa Cruz y otra de Oruro, dieron positivo, quienes inmediatamente fueron aisladas.

12/3 Dos días después de la llegada de la Covid-19, el gobierno de Jeanine Añez  suspendió las labores escolares, los vuelos desde y hacia Europa, y dispuso el control de las fronteras, además de otras restricciones.  

22/3 El 22 de marzo el país ingresó en cuarentena total con la suspensión del transporte público y privado y no salir de casa. Entre otras disposiciones, el Gobierno decidió rebajar las tarifas de agua y luz. 

29/3  El domingo 29 de marzo el país registró su primer deceso por coronavirus. Se trató de una mujer de 78 años que fue contagiada por una persona que llegó de Europa. Sufrió una “neumonía atípica”.