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El único resultado que le sirve a Blooming cuando se enfrente a Real Potosí, el sábado, es el triunfo. Un empate o una derrota lo condenará a jugar el descenso indirecto con el subcampeón de la Copa Simón Bolívar. El decisivo encuentro entre celestes y lilas se jugará en el estadio Tahuichi Aguilera, a partir de las 19:00.

“Estamos concentrados en el partido que viene, sabemos lo que nos jugamos, así que estamos con la mente en Real Potosí”, dijo Samuel Garzón.

El delantero, de 22 años, quiere que los bluministas se lleven una alegría el sábado. La academia celeste depende de sí misma y además juega en casa, donde solo le sirve ganar.

“Tenemos que salir a ganar este partido que es una final. Hay que salir al 110 por ciento para quedarnos con la victoria y darle una alegría a la familia y a la hinchada que siempre va al estadio”, agregó.

Los celestes, que son dirigidos técnicamente por Rodrigo Venegas, esperan contar una vez más con el apoyo de su parcialidad, ya que el partido puede marcar el futuro de Blooming no solo en lo deportivo sino también en lo institucional.

“Es un partido importantísimo, tenemos que salir a ganar desde el inicio. El apoyo de la hinchada es muy importante y lo hemos venido sintiendo partido tras partido, la gente siempre está ahí apoyándonos en las buenas y en las malas”, resaltó Garzón.

Blooming es penúltimo en la tabla de posiciones con 23 puntos, mientras que Real Potosí es antepenúltimo con 25 unidades.

El Deber