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El rector de la Universidad Mayor de San Andrés, Waldo Albarracín, denunció que los estudiantes que fueron encerrados en el museo de la iglesia de San Francisco fueron torturados por efectivos de la Policía y advirtió que pagarán caro por derramar sangre universitaria.

“Hemos mostrado en la conferencia de prensa el nylon donde está la sangre de nuestros estudiantes. Han derramado sangre universitaria, la van a pagar caro, compañeros”, sentenció Albarracín en un mitin en el atrio del Monoblock de la universidad.

Anunció que denunciará ante el Ministerio Público de la violencia que ejercieron los efectivos policiales hacia un grupo de estudiantes que se movilizaron en contra del Código del Sistema Penal y en defensa de la democracia y que intentaron bloquear el paso del Dakar.  

Albarracín condenó que por primera vez en la historia del país la policía irrumpió en una iglesia para arrestar a los universitarios y para “torturarlos”, un hecho -dijo- que ni en las dictaduras ocurrió, porque en esas épocas las iglesias eran centros de refugio de los manifestantes en contra de las dictaduras.

“Tenemos un estudiante que tiene dos costillas fracturadas, otro estudiante con el rostro afectado. Los testimonios son tan dolorosos de los estudiantes que hacen referencia a que una vez en el suelo los policías zapatean sobre sus cuerpos”, denunció la autoridad universitaria en rueda de prensa acompañado de la presidenta de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia, Amparo Carvajal.

mg