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El Ministerio de Gobierno ya tiene identificado al tercer hombre al mando de la estructura criminal que el narcotraficante uruguayo Sebastián Marset tenía instalada en Bolivia. Se trata de  Roberto Arana Suárez., alias ‘Robertito’, quien era el responsable de dar la protección legal a la organización.

Así lo expuso el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, la noche de este domingo, al presentar las pruebas que confirman la relación de este sujeto con Sebastián Marset y sus allegados, por lo que ya se activaron los mecanismos para dar con su paradero.

“Es un prófugo de la justicia boliviana”, manifestó el ministro, al exponer que se pedirá que se active el sello rojo y el sello azul de la Policía Internacional (Interpol) contra este sujeto, cuyos nexos con Marset fueron identificados tras realizar allanamientos en un condominio de la capital cruceña, donde algunos inmuebles son propiedad del acusado que es abogado de profesión.

En estos inmuebles que están vinculados a Marset se halló informes médicos del hermano del narcotraficante uruguayo y de uno de sus hijos, entre ellos una receta. Además, se encontraron fotos de alias ‘Robertito’ con el hombre más buscado de Bolivia.

Asimismo, se advirtió que este prófugo presentaba un flujo migratorio activo en los últimos meses, con salidas a Colombia, Brasil y Estados Unidos, por lo que el ministro apuntó que tiene la capacidad financiera para salir y entrar a Bolivia de manera regular.

“Son tan solo algunos de los elementos que hemos venido encontrando y que no lo vamos a dar a conocer por cuestiones legales”, matizó Del Castillo, pero remarcando que este sujeto se encargaba “de todo el tema legal para blanquear los recursos económicos y para generar algún tipo de beneficio dentro de la justicia boliviana”.

Asimismo, dentro de los allanamientos se encontró un poder suscrito por Sebastián Marset, quien le otorgaba todas las facultades a ‘Robertito’ para que pueda realizar los trámites correspondientes en el consulado de Uruguay dentro del territorio nacional.

Por tanto, Sebastián Enrique Marset no puede alegar desconocimiento de que su entorno cercano no conocía que se encontraba como ‘Marset’ dentro del territorio nacional, sino todo lo contrario: había un grupo de personas que estaba protegiendo sus actividades ilícitas y blanqueándolas para que no puedan ser detectadas por las instancias correspondientes”.

‘Robertito’ también fue el encargado de la compra pasajes aéreos hacia otros países para la familia del capo uruguayo, así como antenas de transmisión que servían para las labores de comunicación de la estructura criminal. “También tenemos otras transferencias bancarias de algunos bienes inmuebles, en los cuales se encontraría viviendo dentro del territorio nacional el señor Marset”, dijo el ministro.

El ministro también señaló que la organización criminal se divide en dos grupos: uno nacional que ayudaba a tener oculto a Marset y que ayudaba en el transporte de sustancias controladas, cuya estructura la conformaba este sujeto y otro considera el segundo al mando de la organización, quien ya está en Palmasola.

Mientras que el segundo grupo de la organización de Marset lo componen extranjeros que operan fuera del territorio nacional, donde está incluida su familia. Estos se encargaban de pagar las sustancias controladas que se fabrican en Bolivia y de recibir las drogas en el exterior.