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Cultivos de papa, haba y maíz, además, de plantaciones de manzana fueron afectados por la precipitación pluvial de tipo sólido en la comunidad de El Molino, de acuerdo con el reporte de los comunarios afectados.

El secretario del sindicato agrario de la comunidad, Moisés Delgado, llegó ayer a dependencias de la Gobernación junto a varias autoridades originarias para solicitar ayuda por el desastre natural que ocurrió el miércoles 24.

Afirmó que el trabajo de casi seis meses de sembrado y florecimiento fue dañado en 15 minutos, lapso en que se prolongó el granizo. El fenómeno natural estuvo acompañado de descargas eléctricas.

Las plantaciones de haba maíz y papa, que estaban en crecimiento, fueron destrozadas por los cocos de agua congelada en toda la comunidad.

“La haba ya estaba floreciendo y sus flores han sido echadas como mixtura por el suelo. Las hojas de maíz han sido cortajeadas como si hubieran hecho con navaja", afirmó.

Luego señaló que un técnico del Gobierno Autónomo Municipal de Yocalla, jurisdicción a la cual pertenece El Molino, ya hizo la evaluación preliminar del daño ocasionado a los cultivos.

Según ese informe, entre el 70 y 75 por ciento de las plantaciones agrícolas están dañadas, pero con la probabilidad de recuperar, a través de un fumigado, complementó Delgado.

“Nos han dicho que hay un elemento con el cual se fumiga para que ayude a recuperar y esperamos que eso podamos conseguir", afirmó.

Los comunarios, ahora, esperan que funcionarios de la Dirección de Gestión de Riesgos (DGR) de la Gobernación realicen la cuantificación del daño ocasionado.

El secretario sindical espera que las autoridades departamentales les ayuden porque es significativo la pérdida de los cultivos.

“Las manzanas ya estaban de buen tamaño y han caído como si fuesen pelotitas de golf, pelotitas de tenis y todo eso ha caído al suelo", comentó visiblemente preocupado.

Calculó que son más de 120 familias las afectadas con el fenómeno climático, las cuales viven de esa producción agrícola y de la manzana.

Los comunarios esperan, si es posible, que la comunidad se declare en desastre para recibir ayuda departamental o gubernamental. No obstante, esperarán la evaluación que puedan realizar los funcionarios de la Gobernación.

Aumenta la cantidad de afectados

Las familias afectadas en el primer mes de 2018 se incrementan a raíz de los fenómenos naturales que ocurren en el Departamento de Potosí.

Las primeras comunidades afectadas fueron en la provincia Modesto Omiste. Una riada irrumpió los cultivos e incluso dañó casas en el municipio de Villazón y que actualmente están siendo atendidas. Otras familias también resultaron afectadas en el norte potosino.

mg