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Después de 20 años, aguas cristalinas vuelven a correr por el río Chaquimayu, ubicado en el kilómetro 2,5 de la avenida Villazón. Las familias que viven en el lugar lo aprovechan como espacio de esparcimiento y para lavar su ropa.

“Venir a este río y ver la cantidad de agua que hay me hace recordar a mi niñez, creo que desde hace más de 20 años que no llega esta cantidad de agua”,  expresó contenta, Julieta Heredia,  mientras lavaba.

Descalza y pisando algunas telas dentro el río, con  el pantalón remangado, con  un sombrero para protegerse del sol  y con una enorme sonrisa en el rostro,  Julieta dijo sentirse feliz por la cantidad de agua que desciende desde las alturas del parque Tunari.

“Lo bueno es que esta agua no viene del río Rocha, por eso esta así. Cuando era niña íbamos hasta arriba a lavar, ahora esto me trae muchos recuerdos”, señaló.

Julieta Heredia, que fue al lugar desde la zona de Quintanillas, llevó consigo frazadas, ropa y algunas telas que utiliza en su negocio familiar.  

Junto a ella estaba Daniela Claro, otro vecina que  con mucho esmero ayudaba a su “mamá a lavar ropa. Casi no se ve tanta agua en este río, pero siempre que llueve tratamos de aprovechar el agua para lavar”,  señaló.

“Como sólo nos dan agua dos veces por semana, es difícil poder lavar algunas cosas en casa. Tempranito vino mi hermana para ver cómo está el agua y como está bajando bien limpia estamos aprovechando”, manifestó Elsa.

Esta situación no sólo es aprovechada para lavar ropa, sino también por conductores de taxis y camiones que a orillas del río sacaban agua con baldes y otros  utensilios para limpiar sus vehículos.

Debajo del puente vehicular se apostó Julia, que vivazmente aprovechó los espacios cercanos, no sólo para hacer lavar sus sábanas, cortinas frazadas y edredones, sino también utilizó la baranda del puente para secar sus pertenencias.

“Yo vivo en esta zona desde hace mucho tiempo. Gran parte del tiempo este río está seco, en años anteriores llegaba agua pero no con la intensidad que ha llegado ahora, por eso estamos aprovechando ahora”, manifestó,  Julia, que afanada subía cargando sus pertenencias.

“Estoy aprovechando el sol para hacer secar de una vez mis cositas”, expresó mientras tendía sus sábanas.

El panorama es distinto en los otros afluentes que están cerca a este río, donde el agua llega turbia. En ciertos puntos confluyen con aguas servidas provenientes de varios sectores que desembocan al Rocha.

“A los otros ríos ni siquiera nos asomamos, porque esas aguas qué tendrán también, agua muy sucia es. Creo que sólo los que lavan autos usan esa agua, pero para lavar ropa o siquiera meterse al agua no es conveniente”,  expresó Elsa.

“Seguro el fin de semana este río se va a llenar de gente, tendremos que venir temprano a reservar un lugarcito para seguir lavando”,  siguió.

Producto de las intensas lluvias registradas en nuestro departamento, muchos ríos incrementaron su cauce. Algunos se desbordaron provocando inundaciones que afectaron a la población, cultivos y animales.

mg