Video

Era  12 de octubre de 2003, cuando    Carlos D. Mesa Gisbert, entonces vicepresidente,   advirtió al entonces primer mandatario  Gonzalo Sánchez de Lozada que  los muertos le iban a  “enterrar” si continuaba en su posición.

La advertencia de Mesa está descrita en su libro Presidencia sitiada, memorias de mi gobierno (2008), en el que relata el conflicto de octubre de 2003, durante  el gobierno de  Sánchez de Lozada, y su paso por Palacio hasta junio de 2005, cuando decidió renunciar a la Presidencia.

Mesa describe  que el 12 de octubre llegó a la residencia pasado el mediodía, 13:34,  y que luego de almorzar un plato paceño con Sánchez de Lozada  se sentaron en el salón de vidrios raybanizados.

 “Estábamos solos, tranquilos, dispuestos a una esgrima verbal, que yo sabía inútil”, se lee en el texto.

En la charla, Sánchez de Lozada, también conocido como Goni,  mientras fumaba un puro, le habría manifestado a Mesa: “Hay tres cosas que no voy a hacer -me dijo- ‘renunciar, llamar a referendo y convocar a una Asamblea Constituyente”.

Esa fue la  respuesta de Goni a  la sugerencia de  Mesa, quien le planteó:  “No insistas en algo que no podrás conseguir. Arriésgate, convoca a una consulta popular  sobre el gas, pero plantéale a los bolivianos que sólo lo exportarán si es con soberanía. Puedes hacerlo, porque sabes que la gente incendiará el país antes que permitirte que saques el gas por Chile. Por eso puedes jugar al todo o nada  y dejarlos a todos boquiabiertos. Si haces esto podrás suavizar el tema de la Constituyente y decir que estas dispuesto a considerar la posibilidad”.

“Los muertos te van a enterrar”, le habría advertido Mesa al exmandatario, pues ya se había vivido “el episodio de Chapare  en enero, los hechos terribles de febrero y estaba en pleno desarrollo una confrontación violenta”.

Ese día, el 12 de octubre,  mientras conversaban los mandatarios, la ciudad de El Alto sufría la mayor masacre de su historia, 26 personas perdieron la vida y más de un centenar resultaron heridas por la militarización.     El gobierno, con el argumento de que tiene la obligación constitucional de abastecer de combustible a La Paz, se abrió paso con disparos contra personas que bloqueaban las vías.

“Todavía no nos habían informado sobre los sangrientos sucesos de la jornada”, aclara Mesa en su texto.

“Sé que no lo harás, te conozco Presidente y no he venido a convencerte, simplemente quiero reflexionar contigo  sobre este momento que estamos viviendo, porque con la misma convicción con que me dices lo que me dices, quiero que escuches mis ideas, sobre todo porque es necesario”, le habría expresado Mesa.
 
Carlos Mesa Gisbert,  expresidente, historiador y periodista, describe a Gonzalo Sánchez de Lozada, también conocido como Goni, como “el hombre más testarudo”. 

“Es el hombre más testarudo que he conocido”, escribió Mesa en su  libro Presidencia sitiada, memorias de mi gobierno.

El ahora vocero de la demanda marítima    describe a Goni como “un gran manipulador, capaz de conducirte por el camino de la reflexión intelectual si era menester...”. 

Mesa describe que  “ese era el Presidente, el de la dilación, el de la larga tarea de dar vueltas y vueltas en círculos concéntricos que terminaban convertidos en laberintos, para morir inexorablemente en su terreno, el del arbitrio y discrecionalidad que alguna vez había sido el arma más poderosa para cambiar el país contra viento y marea”.

Según un fragmento del texto,  Mesa, en 2003,  le habría dicho a Goni: “Tú eres el único Presidente que no podrá vender gas por Chile”.///