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Cenizas es lo que quedó del motorizado de Guido Alcócer, una vagoneta tipo surubí, que ardió mientras se dirigía de Villa Tunari a  Cochabamba, la mañana del domingo. 

Cables pelados y sueltos del vehículo que tenía transformado su volante hicieron contacto con la capa asfáltica que estaba caliente por las altas temperaturas y el fuego inició hasta devorar toda la estructura del vehículo y dejar solamente el armazón. 

Aunque él logró salir a tiempo para salvar su vida, no pudo evitar que el auto dejará de arder. Una cisterna que se encontraba cerca a la zona apagó las llamas porque el vehículo no tenía extintor.