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El enredo del avión que fue incautado por la Aduana la pasada semana continúa, pues este jueves la Administración de Aeropuerto y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (Aasana) mediante su director Ejecutivo, Javier Arévalo, indicó que la nave cumplió con todos los requisitos para ingresar a Bolivia y permanecer en el aeropuerto del Trompillo.

“El avión con matrícula N557 JK que ingreso a Bolivia en abril de 2017 cumplió con lo determinado en el decreto supremo 5110 (1958) y pagó por su derecho de aterrizaje y por el pernocte de la nave hasta diciembre de 2017, por lo que emitieron cuatro factura y ahora está en proceso de conciliación con los propietario otras cuatro facturas”, explicó Arévalo en conferencia de prensa.

Sobre la incautación de la nave por la Aduana sostuvo que “todas las entidades del Gobierno tienen funciones determinadas” y con este argumento evitó responder sobre el tema.

Arévalo después agregó que la posición de la Aduana fue expresada por su presidenta, Marlene Ardaya.

La presidenta de la Aduana indicó: “la posición de la administración aduanera es clara: es una avión de contrabando”.

A principios de semana el ministros de Obras Públicas, Milton Claros, expresó que la nave puede ser recuperada si los propietarios pagan los costos de pernocte a Asaana.///