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El personal de Ryanair, aerolínea irlandesa de bajo coste, se encuentra en su segunda y última jornada de huelga en Bélgica, Italia, Portugal y España para defender sus derechos laborales. El gremio protesta ante el hecho de que haya trabajadores nacionales que lleven años simulando ser irlandeses para que la compañía pueda ahorrarse costes.

Ante esta situación, la compañía ha cancelado 400 vuelos en España, de modo que estas medidas ya han afectado a más de 75.000 viajeros, muchos de los cuales se acercaron a los mostradores de Ryanair en el aeropuerto Barajas de Madrid.

"No puede ser que un tripulante de cabina español" que trabaja en una base española "lleve doce años simulando que es un irlandés desplazado temporalmente a España" para justificar la necesidad de "tener un contrato vinculado a Irlanda", manifestó a RT Antonio Escobar, miembro del sindicato de pilotos SITCPLA.

Estos contratos estipulan la retención de una suma de "entre 10 y 40 euros mensuales" que se deduce del sueldo del empleado español "para pagar el rescate de los bancos de Irlanda", mientras que estos trabajadores "no son ciudadanos irlandeses ni han vivido en Irlanda más que un día", se queja Escobar.

De momento, la compañía Ryanair ha pedido disculpas a través de Twitter a todos los pasajeros que se han podido ver afectados por esta huelga de dos días .

Desde el departamento de Comunicación de la aerolínea aseguran que están estudiando las propuestas del sindicato de los tripulantes de cabina para cambiar el contrato de Irlanda por otro español para que esos trabajadores puedan tener los derechos de la legislación de su propio país.