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El presidente de Argentina, Mauricio Macri, dijo este lunes en la clausura de la 74 Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que las libertades de expresión y prensa son "valores esenciales" y el "verdadero corazón" de la democracia, por lo que consideró "fundamental" defenderlas.

"Sigamos trabajando para que se terminen las censuras y las agresiones, las violaciones a la libertad de prensa y expresión en todo el continente", aseveró el mandatario ante editores y directivos de multitud de medios de comunicación de América, que durante cuatro días se han congregado en la ciudad argentina de Salta.

Para Macri, que llegó al poder en diciembre de 2015, tras 12 años de gobiernos kirchneristas, una de las cosas que han cambiado durante su gestión es que "nunca antes ha habido tanta libertad de prensa como ahora", una afirmación que fue respondida por los presentes con varios aplausos.

"A veces algunos dicen que el Gobierno no debería tolerar que se diga cualquier cosa en los medios. Pero esa Argentina se terminó. En la Argentina de hoy cada persona puede decir libremente lo que quiere y piensa", sentenció.

A su juicio, "la verdad junto con la transparencia es innegociable", un "compromiso fundamental" que su Ejecutivo "tomó como bandera".

"Sabemos que la libertad de expresión y prensa son valores esenciales. Son el verdadero corazón de la democracia y es fundamental defenderlos y repasarlos en todo el continente. Porque detrás de estos dos valores está la búsqueda de la verdad", consideró el jefe de Estado.

Este discurso tuvo lugar poco después de que la Junta de Directores y la Asamblea de la SIP aprobara la "Declaración de Salta sobre Principios de Libertad de Expresión en la Era Digital", con la que se llama a proteger el libre flujo informativo sin importar la plataforma por donde se propague.

"La Declaración de Salta va a ser una guía y nos va a poner en la historia de la libertad de prensa", sentenció Macri, quien basó buena parte de su intervención en destacar los avances que en su opinión ha habido en la materia en sus casi tres años como presidente.

"Ya no hay más un Gobierno generando medios adictos que manipulen la información a su favor, y mucho menos presionando a periodistas para que difundan su versión", continuó, convencido de que ahora el país está pasando por un momento institucional "fuerte" donde los dirigentes "rinden cuentas y donde la corrupción nunca más va a quedar impune".

No obstante, valoró que tanto él como el resto de funcionarios realizan "conferencias de prensa abiertas y constantes" e insistió en que "la libertad que Argentina está construyendo es desde la base del respeto y el trabajo", ingrediente "principal" para combatir la pobreza.