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La Empresa Minera Huanuni (EMH) ha perdido hasta octubre de este año unos $us 7,5 millones por el robo de mineral. La estatal calcula que a diario un tercio de la producción sale ilegalmente de este yacimiento orureño.

La EMH tiene hasta octubre una ganancia de $us 15 millones, pero “si no hubiera robo de minerales, el superávit sería (estimadamente) de $us 22,5 millones”, afirma su gerente, Guillermo Dalence, quien lamenta que hasta la fecha no se cuente con una base de datos para controlar los lugares donde se producen los robos.

“Parece que ese silencio es financiado y cómplice”, manifiesta.

Los ladrones de mineral están organizados en grupos de 80 a 100 personas e ingresan, todas las noches, por los socavones de los alrededores del cerro Posokoni, que alberga en sus entrañas el mineral estaño.

Lo que se percibe es que todo el “mundo” está implicado en el acto ilegal, desde los uniformados que controlan el interior y superficie de la mina, hasta los trabajadores. “A esta situación se suma el desorden administrativo, que favorece al juqueo, todo financiado por el robo de minerales”, afirma.

mg