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La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) expresó su cercanía y solidaridad con las familias de los estudiantes fallecidos la mañana del 2 de marzo durante el accidente en la Universidad Pública de El Alto (UPEA).

"Nos unimos al dolor de las familias de los estudiantes fallecidos y heridos en la Universidad Pública de El Alto y a la consternación de toda la ciudadanía alteña, ante el lamentable accidente que han sufrido durante el desarrollo de una asamblea estudiantil la mañana del 2 de marzo y que ha cubierto de luto y llanto a toda Bolivia", dice el comunicado.

Los obispos de Bolivia comprenden la tristeza y sufrimiento de los familiares y amigos de los estudiantes que perdieron la vida en el accidente y desean que el consuelo de la palabra de Dios fortalezca la oración de los difuntos y piden por la pronta recuperación de los heridos.

Finalmente, desde la CEB se hizo un llamado a las autoridades para que se investiguen los hechos y se establezcan las responsabilidades para que la enseñanza de este momento permita que estos sucesos no vuelvan a ocurrir.

"Llamamos a las autoridades nacionales y de la UPEA a hacer cuanto esté en sus manos para investigar los hechos y extraer enseñanzas de este terrible y lamentable accidente, para que, establecidas las responsabilidades, hechos como este no vuelvan a repetirse", acota el comunicado.

La mañana del 2 de marzo se realizó una asamblea estudiantil en la UPEA donde se generó un conflicto entre dos bandos de estudiantes, quienes se aglomeraron en los pasillos del cuarto piso y ante la presión por la cantidad de gente la baranda se rompió dejando a siete estudiantes fallecidos.