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En la cuenca ubicada por los municipios de Gutiérrez y Lagunillas, por las aguas que bajan desde la región de Ñancahuazú, hoy se ha registrado una crecida 12 metros de altura, siendo lo normal de 6,5 a 7 m, mientras que en Abapó, aguas abajo, está a un nivel de 4 m, por lo tanto, el departamento se encuentra en alerta naranja por la crecida grande de los ríos del departamento.

En este sentido, José Antonio Rivera, coordinador de la Dirección de Cuencas, alertó que aproximadamente a las 3.00 a 5 am de la madrugada de mañana sábado llegará a esa crecida en la zona de Pailón, la cual irá avanzando sucesivamente.

Por lo tanto, mediante un relevamiento, el Searpi ha identificado las zonas críticas y ha informado a los gobiernos municipales sobre los ríos que deben iniciar los respectivos planes de acción de alerta temprana, las cuales ya se han comenzado a ejecutar. De la misma manera, recomendó que las autoridades locales den a conocer estos puntos susceptibles a los pobladores, principalmente en cuenca alta del Río Grande, en la zona de Abapó, y también se está empezando a alertar a los municipios de la cuenca baja.

Por su parte, el director de la institución, Ricardo Arana, manifestó que no solo preocupa las crecidas de las cuencas del río Piraí, sino también las del Río Grande y de Yapacaní.