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La frontera entre Cochabamba y Colcapirhua representa un conflicto en época de lluvias para el municipio cochabambino por la anegación de aguas.

Este sector de la ciudad está considerado dentro del plan de contingencia de 2022 de la Alcaldía de Cochabamba para darle una solución definitiva al problema de inundaciones.

Este martes hubo una inspección en la que participaron las alcaldías de Cochabamba y Colcapirhua, la Gobernación y personal del Tren Metropolitano para determinar las acciones necesarias en la zona.

La zona de K’aspichaca, donde hubo inundaciones el domingo, comprende los canales Arquímides, Rumi Mayu y Valverde. El secretario de Infraestructura de la Alcaldía de Cochabamba, Gustavo Navia, informó que para este sector alistan la construcción de un cárcamo de bombeo con tuberías de evacuación. Este trabajo debe ser coordinado con el municipio de Colcapirhua.

La autoridad explico el lunes que al problema se sumaron las obras del Tren Metropolitano, “porque la plataforma, aparentemente, no contaría con el desagüe pluvial correspondiente, lo que produce problemas al constituirse en una especie de dique”.

Hubo un recorrido en la zona. Desde la Alcaldía informaron que delinean trabajos a realizarse de manera conjunta.

Manifestaron que se acordó que todos desplazarán maquinaria, bombas y personal para desfogar las aguas que se generen por las lluvias.

La Municipalidad de Cochabamba ya opera con bombas estacionarias las 24 horas, además de haber desplegado equipo pesado para reforzar los bordes del canal de la zona.

Los técnicos manifestaron que el caudal disminuyó.