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“Estamos pidiendo una reunión con autoridades para sugerir al Alcalde reconsiderar la suspensión. Nosotros planteamos que se negocie el tema de aforo y horario porque con la medida lo único que va  a lograr es que la gente migre a las provincias o fiestas clandestinas”,  dijo el representante,  Roberto Orellana.

Afirmó que la restricción perjudica a este rubro porque en la mayoría de los casos los dueños de establecimientos nocturnos ya contrataron grupos musicales internacionales, personal y productos como tragos.

Orellana remarcó que en algunos casos los propietarios adelantaron hasta un 50 por ciento a los artistas por los shows y que se hicieron hasta reservaciones.

“Somos 99 discotecas de la zona norte, sur y del centro, estamos predispuestas a cumplir con las normas de bioseguridad, reducir el aforo y someternos a los controles”,  subrayó.

El sector se declaró en emergencia y aguarda una respuesta.

Por su  parte, el presidente de la Asociación de Empresarios de Restaurantes y Ramas Afines (Aserac),  Tony Salazar,  sostuvo que se recomendó a sus afiliados evitar las aglomeraciones y atender en los horarios establecidos.

“Esta medida se ha tomado para precautelar la salud de la población. Es cierto que había gente que ya tenías las cosas listas, pero tenemos que cumplir las disposiciones para evitar que más adelante se paralice la cadena productiva, además no podemos negar que hemos tenido flexibilidad en el municipio”, concluyó el representante.