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Monseñor Ricardo Centellas, Arzobispo de Sucre, señaló este miércoles que el informe preliminar del relator de la ONU, Diego García-Sayán, ratifica la necesidad urgente de reestructurar la justicia en el país, abordando los problemas que viene arrastrando por muchos años.

“Una vez más se ratifica la urgente necesidad, y además lo pide el pueblo boliviano, de una reforma estructural de la justicia”, señaló Centellas a radio Loyola de Sucre.

El Relator Especial de las Naciones Unidas para la independencia de los jueces y abogados, presentó la víspera un informe preliminar de nueve puntos, luego de una visita de siete días a Bolivia.

El religioso indicó que una transversal del informe del relator es “reorganizar y reformar la administración de la Justicia con independencia”. “Creo que es una de las necesidades que Bolivia lo siente y lo expresa en todas partes, y el que viene al país siempre va a constatar que nuestra justicia no es independiente”, apuntó.

Centellas dijo que una vez más, después de una serie de apreciaciones, se ratifican las grandes demandas que tenemos como país en el ámbito judicial desde hace muchos años.

“Una de las constataciones que llama la atención es que más del 50% de los que administran la justicia son improvisados, entonces esto nos da a entender que nuestra justicia está mal organizada”, refirió.

Dijo que, por otra parte, tomando en cuenta el informe del relator, la detención preventiva que es extraordinaria, en la práctica viendo siendo una realidad ordinaria, “donde en las penitenciarías se puede constatar” la gran cantidad de detenidos preventivos.

“Hay demasiados datos para darnos cuenta que la administración de la justicia tiene que ser reformada lo más antes posible, pero ojalá no por los políticos”, enfatizó.

El arzobispo dijo que como ciudadanos debemos seguir pidiendo que la justicia se reforme, buscar los caminos más adecuados “para que lleguemos a una reestructuración de la justicia de manera independiente, rápida y solvente; eso hay que seguir pidiéndolo desde todos los ámbitos y como personas individuales en Bolivia”.