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El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, presentó este jueves al presunto autor de un doble infanticidio suscitado el 24 de abril de la presente gestión en la provincia Inquisivi, comunidad Copacabana, perteneciente al departamento de La Paz. Juan Carlos P. G., el padre de los menores de 3 y 9 años, sería el autor del crimen.

“Según la información que se tiene hasta el momento, los niños de iniciales O.C.M., de nueve años de edad, y Z.P.C., de tres años de edad habrían consumido alimentos envenenados entregados por su padre, el móvil de este hecho sería una deuda que el padre tenía con la madre por asistencia familiar, la cual superaba los 12.000 bolivianos”, detalló la autoridad.

Acorde a las investigaciones efectuadas por la Policía Boliviana y el Ministerio Público se determinó que el padre de los niños echó enveneno a los alimentos que fueron ingeridos por ambos menores, causándoles la muerte.

El sujeto cuenta con antecedentes de narcotráfico en la gestión 2019, mientras que su concubina, Ana Q. C., actuó como coautora del delito; ambos fueron aprehendidos por las fuerzas del orden y serán puestos ante instancias de la justicia ordinaria.

“Nuestra Policía Boliviana, dentro de los elementos y los hechos investigativos, ha procedido al levantamiento legal del cadáver de los dos menores de edad, al registro del lugar del hecho, fijación fotográfica, colección de indicios materiales, entrevistas a testigos que demuestran que esta señora era cómplice y estaba ayudando a escapar a este sujeto”, aseveró el ministro.

Comunarios del lugar reaccionaron indignados al conocer el trágico suceso y pretendían quitarles la vida a los autores, por lo que el actuar oportuno de la Policía  evitó tal situación logrando la aprehensión de ambos criminales.

Se presume que utilizó un tipo de herbicida para acabar con la vida de los menores, pero eso será dilucidado después de la necropsia a los cuerpos. Igualmente, la autoridad pidió que todos los procesos judiciales se realicen en La Paz, para evitar que los pobladores hagan justicia por sus manos.