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El crecimiento económico de China se moderaría a 6,8 por ciento en el tercer trimestre desde un ritmo de 6,9 por ciento en el período anterior de tres meses, debido a un enfriamiento del sector de las viviendas y a la batalla del Gobierno contra los riesgos de la deuda, halló un sondeo de Reuters.

La desaceleración proyectada por los analistas contrarió la estimación del gobernador del banco central Zhou Xiaochuan que sugería una sorpresa alcista, de que la economía podría crecer 7 por ciento en el segundo semestre del año contra 6,9 por ciento en los primeros seis meses.

El sondeo entre 54 analistas, realizado antes del pronóstico de Zhou, mostró una modesta moderación en la expansión del PIB, pero aún dentro de la zona de comodidad de Pekín, mientras el presidente Xi Jinping se prepara para consolidar su poder en un Congreso del Partido Comunista esta semana.

Zhang Yiping, un economista de Merchants Securities, dijo que el pronóstico de Zhou podría haber elevado el riesgo al alza para su predicción de una expansión de 6,8 por ciento en el tercer trimestre, aunque él todavía preveía un enfriamiento gradual de la economía.

“La economía probablemente se modere constantemente dado que podría desacelerarse la inversión en propiedades e infraestructura, aunque el impacto del aumento del costo del endeudamiento podría ser limitado”, dijo Zhang.

Los analistas proyectan una desaceleración gradual del Producto Interno Bruto (PIB) por un esperado debilitamiento de la inversión en bienes raíces y la construcción, en momentos en que crece el número de ciudades que buscan frenar la escalada de los precios de las viviendas, a la vez que una campaña oficial contra los créditos más riesgosos sube el costo de financiación.

China divulgará el dato de la evolución del PIB del tercer trimestre el 19 de octubre - un día después de la apertura del Congreso del Partido - junto con la producción industrial, las ventas minoristas y la inversión en activos fijos de septiembre.