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Tras cinco días de bombardeos por parte de las fuerzas gubernamentales sirias en la región de Guta Oriental, al menos 335 personas han muerto y 1.745 han resultado heridas, según cifras del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.

Los 400.000 habitantes de la región de Guta Oriental, cerca de Damasco, la capital de Siria, siguen en riesgo tras cinco días de bombardeos por parte de las fuerzas armadas del gobierno de Bashar al-Asád, presidente de ese país.

Según cifras del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), "al menos 13 personas, entre ellas tres niños, murieron en Duma", principal ciudad de Guta Oriental el jueves 22 de febrero de 2018. Además, también 120 civiles resultaron heridos.

Estos se suman a los 50 fallecidos del miércoles y al total registrado desde el domingo 18 de febrero en esta zona. Según el OSDH, al menos 335 muertos, entre ellos 79 menores de edad y 50 mujeres, además de 1.745 heridos han sido reportados.

Las fuerzas leales al presidente sirio, Bashar al-Asád, lanzaron 207 cohetes contra la ciudad de Duma, 100 proyectiles contra las poblaciones de Saqba, Kafr Batna y Yisrín, y 30 contra Arbín. Además, la artillería gubernamental arrojó el miércoles 21 de febrero en la noche 12 cohetes contra Harasta, que dejaron fuera de servicio un centro médico de la Media Luna Roja Siria.

El OSDH señaló que desde la mañana del jueves los aviones no sobrevuelan la región debido a las malas condiciones meteorológicas. Un periódico cercano al gobierno del presidente sirio al-Asád aseguró que la campaña de bombardeos contra Guta Oriental es un preludio a una ofensiva terrestre.

Centros médicos fuera de servicio para atender la emergencia

Nueve centros médicos quedaron fuera de servicio desde el domingo por los bombardeos en Guta Oriental, el principal feudo opositor de las afueras de Damasco, según el OSDH.

Las últimas instalaciones médicas que dejaron de funcionar por los bombardeos de aviones de guerra y helicópteros son los centros sanitarios de Duma, Madira y Yisrín, según fuentes consultadas por el OSDH.

En los últimos días también habían quedado fuera de servicio por los ataques el Hospital de Dar al Shifa, en Hamuriya, el Hospital Quirúrgico de Arbín y tres centros médicos en Kafr Batna y Saqba.

La Sociedad Médica Sirio-Americana (SAMS) informó el miércoles en un comunicado en su página de Facebook que al menos 20 instalaciones sanitarias han sido blanco de ataques y que cuatro trabajadores de estos centros médicos han perdido la vida, tres de ellos miembros de esa ONG.

Antes de Guta Oriental, otras zonas rebeldes, como el casco viejo de Homs en 2012 o Alepo en 2016, sufrieron bombardeos constantes y un asedio que obligó a los combatientes rebeldes a entregar las armas y a los civiles a huir.

mg