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El canciller Rogelio Mayta confiró este viernes que la Comisión Interamericana de Derechos humanos (CIDH) denegó la solicitud de medidas cautelares de Jeanine Áñez y aseveró que este rechazo es una prueba de que todas las acciones de la exmandataria fueron una “escenificación” que buscaba poner en tela de juicio el trabajo del Estado en el cuidado de su salud.

La exmandataria solicitó medidas cautelares el 27 de agosto, días después de un intento de suicidio en el penal de Miraflores, en La Paz, donde se encuentra con detención preventiva por el caso de supuesto golpe de Estado. La defensa de Áñez alegó que la vida de la exmandataria estaba en riesgo.

“Esta evaluación que hace la CIDH hecha por tierra toda da la argumentación, todo lo que se trató de expresar a estas alturas, nos muestra que ha sido una escenificación. Todas esas movilizaciones, esas acciones que se han venido dando, muestran que no ha habido sustento. Estaban dirigidas a generar cierto clima de orden político. El estado va a seguir cumpliendo con las normas y cumpliendo con a seguridad de la señora Áñez”, indicó Mayta en conferencia de prensa en La Paz.

El canciller indicó que la determinación de la CIDH muestra que “nunca ha estado en riesgo la vida de Jeanine Áñez, al menos no por alguna conducta relacionada con su detención preventiva ejecutada por instancias estatales nacionales”.

Mayta dijo que “está claro que el Estado plurinacional siempre ha garantizado la salud y vida de Áñez”.

El canciller afirmó que “toda la situación conocida los medios de comunicación, ha sido prácticamente una escenificación, una puesta en escena para tratar de cuestionar al estado boliviano”.

Pero, continuó, “la misma CIDH señala que habiendo denegado esta posibilidad de medidas cautelares, las personas que han solicitado esa medida pueden volver a hacerlo en su momento”.