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Gustavo Santos V. A., sospechoso de asesinar y descuartizar a una familia de bolivianos la noche de Navidad de 2018 en San Pablo, Brasil, fue capturado en Santa Cruz de la Sierra, en la zona de la Villa 1º de Mayo. 

"Me debía dinero", dijo el hombre luego de ser presentado ante los medios de comunicación. "Nadie sabía nada de lo que hice. "Al niño lo maté dos días después de haber matado a sus padres. No sabía qué hacer, lloraba mucho y preguntaba por sus padres".

A pesar de que el crimen fue cometido en Brasil y la orden de arresto también fue emitida por la justicia brasileña, no se sabe si el hombre será entregado a la Policía Federal de Brasil. El destino del sospechoso debe ser definido en las próximas horas por un juez de Bolivia, según informó la abogada Patricia Vega, representante de los familiares de la víctima.  

Los cuerpos de Jesús Reynaldo (39), su esposa Irma Morante Sanizo (38), y el hijo de la pareja, Gian Abner Morante (8), fueron encontrados descuartizados en sacos de plásticos, en una residencia en Itaquaquecetuba, en la región metropolitana paulista, el 8 de enero.

Tortura antes de ser asesinados

Pericias del Instituto Médico Legal de San Pablo apuntaron que la pareja fue asesinada por estrangulamiento y su hijo por un golpe en la cabeza.

La pareja estaba desaparecida desde el 23 de diciembre, fecha en que el sospechoso alquiló la casa donde se encontraron los cuerpos. Se habría hecho pasar por otra persona de nombre Irma y envió mensajes del celular de la víctima a sus familiares, diciendo que la familia se había mudado a San Pablo, donde tenía un taller de costura.

El sindicado era cuñado de la pareja y según familiares tenía un historial de violencia y consumo exagerado de alcohol.///

Conferencia de prensa Ministro de Gobierno Carlos Romero desde la FELCC #SantaCruz https://t.co/q921HD4WBW— MinisteriodeGobierno (@MindeGobierno) 10 de febrero de 2019