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Entre gritos y dolor, los pacientes del Centro de Salud Central de Trinidad, vieron el desmantelamiento de esta entidad, que el pasado 15 de mayo fue entregada por la presidenta transitoria de Bolivia, Jenanine Añez. 

La empresa Mediquip, que dotó de todos los equipos para el funcionamiento de este centro, procedió al retiro de camas, respiradores, muebles, equipos de bioseguridad, ante la falta del pago por la entrega de estos equipos.

Durante la jornada llegaron a la ciudad de Trinidad, una flota de camiones, que procedieron a retirar todos los equipos instalados hace seis meses, simplemente para que la presidenta juntos a sus ministros benianos entreguen estos equipos. 

MEDIQUIP, empresa que se adjudicó esta compra directa, está administrado por el señor Eduardo Claros Mostajo, primo director del ex embajador de Ciencia y Tecnología, Mohamed Mostajo. 

Dicha empresa, se adjudicó de manera directa, por 30 millones de bolivianos, la dotación completa del Centro de Salud Central de Trinidad, para atención inmediata en los casos Covid y otras enfermedades tropicales. 

Tras el desmantelamiento del 98% de las instalciones, se hizo presente en el lugar el presidente del Comité Cívico de Beni, Geiser Chávez Araujo, allegado al partido Demócratas, y manifestó que no permitirían el desmantelamiento de este centro, cuando en realidad, ya los equipos estaban en los camiones y rumbo a Santa Cruz. 

30 millones invertidos en los equipos

El pasado 15 de mayo, la presidenta entregó 11 respiradores artificiales, 22 camas de internación, 70 televisores, para este centro, con un costo de 30 millones de bolivianos. 

Según información de autoridades locales, durante la primera semana de junio se observó el alto costo de los equipos entregados para este centro, pero ninguna autoridad quiso contradecir al Ministro de la Presidencia Yerko Nuñez, y al Ministro de Justicia Álvaro Coímbra, quienes participaron de esta entrega junto a la presidenta Añez.

Con información de Red de Periódicos amazónico