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Luego de salir de la cárcel de San Pedro, el cocalero César Apaza fue internado en el Hospital Arco Iris, donde se brindó un diagnóstico general de su estado de salud.

Según el informe médico, Apaza padece de parálisis en el lado izquierdo del cuerpo, diabetes confirmada por los estudios, aunque se encuentra actualmente estable y no habría riesgo de vida.

Luis Bedregal, director médico del Hospital Arco Iris, explicó que la parálisis de Apaza sería por un “aparente evento isquémico cerebral que ocurrió hace un año”. 

Explicó que Apaza como diabético necesita tratamiento continuo y seguimiento adecuado, mientras que para atender su parálisis requiere fisioterapia para tratar de incorporarlo lo más pronto posible a su vida natural.

De todas maneras, recalcó que el cocalero se encuentra estable, es consciente y puede mantener una conversación, por lo cual no habría un riesgo de vida.

Estimó que Apaza estará en el hospital entre 24 a 48 horas, antes de ser dado de alta.

Apaza salió de la cárcel la noche del jueves 18 de enero, luego de estar privado de libertad desde septiembre de 2022. 

Fue liberado tras aceptar inculparse en el caso por la toma del mercado paralelo de coca. Durante ese conflicto, Apaza era dirigente de los cocaleros de los Yungas contestatario al Gobierno.

La Defensoría del Pueblo estableció que Apaza sufrió tratos crueles y degradantes de parte de policías cuando fue detenido. 

Su caso ha generado preocupación de entidades defensoras de los derechos humanos por las condiciones de salud que padecía en la cárcel. La organización internacional Human Rights Watch consideró que la detención de Apaza tenía elemento político.